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NO SE PUEDE DAR UN BUEN SERVICIO SI SU PRODUCTO ES MALO.

Por mucho que se esfuerce, nunca podrán brindar un buen servicio si el producto que vende es malo.  Si este se desgasta muy pronto o se rompe antes de lo esperado ni el mejor sistema de atención al cliente lograra salvarlo.  Por más que haga los clientes se molestaran por la mala calidad que usted les haya vendido.
Por lo tanto, si vende un producto que considere que pueda mejorarse sea incrementando su calidad o modificándolo para que satisfaga mejor necesidades de los clientes, usted debe pasar el mensaje al fabricante.
Pero aunque le sorprenda no es fácil a fin de cuentas, los fabricantes creen conocer muy bien sus mercados y, por si fuera poco, a nadie le gusta que un tercero venga a decirle como debería de hacer las cosas.
Para lograr que lo escuchen  se debe fomentar la credibilidad, la credibilidad es algo que tarda tiempo en conseguirse, no espere las mejores relaciones y credibilidad treinta días después un contrato de distribuciones.
Se deberá ganar la confianza y eso tiende mucho tiempo  por que son muchas las cosas que tendrán que demostrarles por ejemplo que usted es un buen minorista, que usted pueda vender lo que le ofrecen.
Pero eso va más allá del desempeño.
Para empezar debe conocer a fondo el producto en cuestión en segundo lugar, debe conocer el mercado y lo que esta haciendo la competencia.  En tercer lugar se debe conocer cual es el proceso de desarrollo de su producto.  Quinto se debe aprender hablar el lenguaje del fabricante, es importante, a veces el minorista y el fabricante llaman a un mismo articulo de dos maneras diferentes.
“Mientras usted no logre demostrar al fabricante que realmente sabe de que habla, de que comprende su negocio y sus problemas también como conoce el propio, poco será el caso que le haga, por muy buena que sea su idea”.
Nadie esta mas cerca de los clientes que los minoristas, por eso es importante que los fabricantes los escuchen.
Otra ventaja de la participación de los distribuidores en el proceso de planeación de la fábrica es que ellos pueden informar sin temor cuales son los aspectos que no gustan a los clientes.  Quizás en el pasado no era necesaria esta participación sin embargo ahora es indispensable, ya que actualmente cada segmento del mercado esta fuertemente competido, debemos estar cerca del cliente para descubrir exactamente el tipo de producto que desea, lo que significa que todos los que tratan con los clientes deben de participar en el proceso de planeación.
La forma más fácil de conseguir que nuestras ideas se tomen en cuenta consiste en hacer sugerencia fácil de implantar, ideas que se puedan llevar a cabo con poco esfuerzo pero cuyos resultados produzcan grandes beneficios.
Pero debemos tener razón.  Las personas deben obtener los resultados favorables que les planteamos, mientras lo que les digamos sea verdad seguirán escuchándonos.  En  cambio, si lo que les decimos resulta equivocado dejaran de hacernos caso.

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